Las flores decorativas alegran mucho la sala donde se celebra la fiesta. No solo se pueden poner pegadas con cello a las paredes o puertas, sino también se pueden pegar en los arcos, columnas e incluso en los pies de los ramos. Todo depende del tamaño que inflemos los globos. Son muy sencillas de hacer.
Con un inflador cogeremos cuatro globos del mismo color (también puede ser de colores variados), los inflamos a una medida que nos parezca adecuada, teniendo en cuenta que serán los globos exteriores.
Unimos por parejas y a continuación las parejas entre sí, enroscando los globos superiores entre ellos y lo mismo haremos con los globos inferiores.
Cogeremos otros cuatro globos del color que nos guste, y los inflamos esta vez como a menos de la mitad de lo que hemos inflado los globos exteriores. Hacemos el mismo proceso de unión que con los exteriores.
A continuación cogemos el cuello de los globos, y poniendo este cuarteto por encima del primero exterior, los pasamos por el hueco del centro, damos la vuelta a los globos y atamos los cuellos haciéndoles un nudo.
Cogemos otro globo, inflamos a la misma medida que hemos inflado el segundo cuarteto. Cogemos el cuello y situándolo por encima del segundo cuarteto, pasamos este cuello hasta abajo del todo y damos una vuelta con él por los cuellos de los globos.
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